Planificando el cambio organizacional
Que experiencia enriquecedora….
Poder constatar que a lo largo y ancho de nuestro país y de la región existe una sensibilización por atender la agenda de las empresas familiares es para mí siempre una oportunidad de aprendizaje y satisfacción.
Esto ha ocurrido en Bahía Blanca, a donde fui invitado por Silvia Batista (directora de la sede del IADEF y Coordinadora del “PROGRAMA UNIVERSITARIO EN EMPRESAS DE FAMILIA” de la UNS. A ella y a todos los que participaron: mi agradecimiento.
El seminario, como es habitual, comenzó con la invitación a compartir expectativas sobre el tema: “PLANIFICANDO EL CAMBIO ORGANIZACIONAL EN LA EMPRESA DE FAMILIA”. La inquietud general se focalizó en obtener “herramientas para hacer”. Sin embargo, lo rescatado al finalizar, fueron temas e ideas sobre aspectos que deberían profundizar en el seno de sus familias y empresas para abordar un proceso de trabajo acordado por todos a partir de la visión de cada uno.
Es natural que el emprendedor, fundador, quiera hacer y resolver…
Pero cuando se quiere favorecer una transferencia generacional es necesario contar con cierto grado de profesionalización de los propietarios que podemos resumir en tres verbos:
Diagnosticar – Reflexionar – Decidir
En momentos de inflexión como el que mencionamos es conveniente que esas acciones precedan lo operativo.
Quiero finalizar animando a quienes las lean y se vean involucrados de alguna manera en la empresa familiar a hacer una pausa en el hacer. Como reconoció un miembro de una familia empresaria: “Los propietarios y directores tenemos que empezar a valorar y ocuparnos de los temas menos visibles para tener mayores y mejores resultados”